“Soy Ana María. Esta es mi primera bebé, fue un embarazo sin complicaciones, sin mareos, fue un embarazo muy tranquilo. A la hora de tener a la bebé: fue con fórceps, la médica me dijo que el cuello mío era muy estrecho, entonces que era difícil para la bebé pasar. Fue muy duro para mí, porque uno ha escuchado historias que los bebés o la mamá pueden quedar con problemas, pero afortunadamente no hubo complicaciones para ninguna de las dos.
El postparto, como tal, me pareció más duro que el momento del parto y el embarazo. Para mí fue asimilar todos los cambios que uno tiene en TODOS los aspectos. Primero, el tema social, parece que a las personas les dijeran: “ella tiene un bebé no le vuelva a hablar nunca” o “ella está en embarazo no la vuelvan a invitar a ninguna parte”, son pocas las personas que aún siguen con uno; afortunadamente tengo unas amigas que son muy cercanas, pero hubo mucha gente que se alejó de mí y de mi esposo. Es una sensación de soledad en principio muy fuerte, y sobre todo por lo que digo que es mi primer bebé. Si yo vuelvo a quedar en embarazo, uno aprende a manejar ya muchas situaciones.
También el tener que permanecer en reposo, quedarse en la casa mientras pasa la dieta, mientras la bebé va creciendo, las trasnochadas, a mi me pareció muy duro el primer mes: uno es cansado, uno no duerme, el cuerpo le duele. Yo toda la vida he sido una mujer gorda, pues, no muy gorda más bien gruesa, jejej, entonces yo me subí mucho de peso. Dicen que uno se debe subir de 8 a 9 kilos, yo me subí 24 kilos de los cuales sólo he podido bajar 4 kilos. Entonces es verse completamente diferente. Está uno más gordito, la panza está caída, flácida, eso baja mucho la autoestima. Toca aprender a aceptarse, a quererse mucho. Aprender a entender todo esos cambios, hay días en los que me levanto y… aún sigo sientiendo que el cambio es muy fuerte
En mi caso hubo episiotomía, el procedimiento donde cortan; después de eso cuando reía o estornudaba se me salía “chichí” (orina), tampoco era capaz de aguantar ir al baño, antes podía aguantarme, y ahora debo ir ya o se me empieza a salir por gotas. Si uno piensa salir a la calle es muy incómodo.
Con respecto a la situación física con mi esposo he tenido muchos inconvenientes. Primero, las recomendaciones del médico es esperar dos meses para tener relaciones sexuales, yo los esperé muy juiciosa. Pero cuando inicié otra vez con las relaciones, yo me sentía muy ancha, se me dificultaba la cuestión de poder sentir placer, no hablo del placer del beso, hablo del placer de la penetración, se me dificultaba; con la cuestión de la lubricación es muy fuerte aún ahora, es difícil poder lubricar, me tengo que concentrar demasiado para poder medio lubricar, pero es muy poco, en comparación a antes del embarazo. Eso lo afecta a uno también, uno siente a veces como pena, se siente incómodo.
Mi bebé nació en Diciembre del 2019, ya tiene 1 año y dos meses. A finales del año pasado yo comencé a leer sobre los ejercicios de piso pélvico, y lo que he entendido con la internet, he empezado a hacer uno que otro, he notado el cambio, pero no mucho porque creo que empecé tarde, pero si he notado el cambio en el momento de la relación he empezado a sentir un poco más, un poquito de lubricación y he estado pendiente de pedir una cita con el ginecólogo porque quiero tratar bien de este tema de la respuesta sexual. Afortunadamente he tenido apoyo de mi pareja, me ha entendido, no he sentido jamás presiones, sino que me sienta cómoda con la situación, entonces es un punto a favor.
Y con respecto al cuerpo lo que más me ha afectado es el sobrepeso, me encantaría rebajar y ayudarme a eso con un té o algo, pero aún no puedo porque estoy lactando. Entonces es entender que uno se pospone mucho rato, y aunque uno ama mucho a su bebé si siente como con nostalgia o extraña cosas.
Una de las cosas que me incomoda es que mi barriga quedó caída. Cuando yo estaba en embarazo, el médico me decía que yo no producía casi colágeno, entonces pienso que eso tal vez afecta a que mi piel haya quedado más colgada que la de otras personas, porque yo le he preguntado a varias mujeres, y aunque me dicen que les ha quedado su pancita colgando, no ha sido como en mi caso, creo que es debido a eso. Estoy pendiente de esto para poder sentirme más cómoda conmigo misma, he ido donde nutricionista, y me dicen que al contrario, que a medida que vaya bajando , la piel me vas a quedar más colgada, entonces todos me dicen que debo hacerme una abdominoplastia, y cuando uno tiene la autoestima así, es bueno hacerse algo que le ayude.
En mi caso la experiencia más fuerte fue el postparto, no el embarazo o el parto, todo lo que ocurre: los amigos, la sociedad, el cuerpo, las relaciones con la pareja, es muy fuerte porque no se lo mandan a uno de a pedacitos, es todo de batacazo, todo junto. Entonces me parece muy chévere que existan acompañamientos de este tipo, que le enseñen a uno muchas cosas, por ejemplo, a mi me hubiera encantado tener conocimiento más rápido de piso pélvico para hacerlos rápido; yo no me pude fajar por esta cortada que tuve; haber hecho como otras cosas, pero pienso que cuando uno escucha a otras mujeres que están en la misma situación que uno, y saber que realmente no es a uno solo al que le pasa le ayuda mucho, se siente uno que no está solo, a alguien más le sucede.
Yo tuve a mi bebé en Diciembre, y a mi siempre me ha gustado mucho salir, entonces cuando tuve el 15 de Diciembre a mi hija, estuve encerrada en la casa sin salir, con dolores, yo pensaba que eso iba a ser eterno, que me iba a quedar siempre así encerrada, con dolores, y no, la verdad es que el tiempo pasa, uno toma fuerzas, uno va creciendo, se instruye, lee. Obviamente si hay alguien que lo escuche a uno, porque aunque uno tenga la compañía de su pareja, los hombres nunca vana entender de la misma forma qué le pasa a uno, porque ellos acompañan, o la familia, pero es uno el que está viviendo eso, y no es fácil manifestarlo y que lo entiendan. Entonces es muy rico que hayan otras personas que lo puedan entender a uno, acompañarse, darse ánimo, sobre todo pienso yo, tratar mucho como la ansiedad, eso que uno sufre mucho de ansiedad, Yo sufrí mucho de ansiedad, quería tomarme unas pastillas para eso, pero obviamente no las podía tomar por la lactancia, entonces es escucharse, entender, que todo va a pasar, trabajar mucho la autoestima.
La maternidad es muy linda, pero trae muchas cosas que hay que saber llevar , porque sino uno se puede desesperar. Y no falta la mamá que le dice a uno yo tuve 3, o la abuela que le dice a uno yo tuve 9, porque no es lo mismo, las épocas son diferentes y todo cambia; es vivir las cosas en el momento en el que uno está, y vivir con el acompañamiento, con alguien que lo escuche.
Antes de quedar en embarazo, yo fumaba cigarrillo y me tomaba todos los días un “vive 100”, y no lo volví a hacer. Hace como un mes, por la ansiedad, volví a fumar, uno o dos cigarrillos. Sé que no es debido, pero uno también tiene que entender cómo está uno para saber cómo estar con el bebé. Uno, como decía, se pospone mucho, entonces no puedo fumar un cigarrillo, ni tomar el “vive 100” ni la cerveza, no puedo tomar un té, ni las pastillas que quiero tomar.
Yo afortunadamente no tuve problemas con la lactancia, porque como no me salía casi leche, no me dolía el pezón, o que se me irritó, nada de eso. Pero es otra cosa que pienso yo que la sociedad se lo impone a uno. El primer mes yo le daba sólo seno a mi hija, y ella siempre lloraba mucho, entonces leía, que lactancia exclusiva, que era muy importante, que no se le diera leche de fórmula, entonces que usted no es buena lechera, entonces es una presión social que te tiene que salir leche, y si no te sale, entonces no sos buena mamá.
Al mes exacto fui al control con mi hija y resulta que sólo había subido 300gr, o sea, no había subido nada, que aunque es entendible que los bebés pierden peso al inicio, pero estaba debajo del peso que debería estar normalmente. Yo tomé todos los remedios naturales que dicen por ahí: que cebada, que hinojo, que malta, que aguapanela con leche, me mandaron pastillas, bueno de todo. Entonces el médico me dijo, mañana te vas a ir y vas a tomar mucho, mucho mucho líquido, te vas a tomar las pastillas y te vas a extraer la leche a ver cuanto te sale, yo hice eso, me extraje la leche y me salieron 4 onzas en 9 horas y me dijo que no, que debían salir 4 onzas cada 3 horas para que el bebé tuviera una buena alimentación. Entonces se le mandó leche de fórmula porque a mi sola no me daba. Entonces me sentí la peor mamá del universo, que no servía para nada porque no me salía leche, pero todo es debido a lo que le dicen a uno en la calle, y estuve leyendo acerca de eso, por todo lo que sentí, y decía que solo el 10% de las mujeres lactantes lo hacen sin necesidad sin necesidad de ayuda de otras cosas. Entonces esa fue otra cosa que aprendí yo, si en un futuro tengo otro bebé, si no me sale, no voy a poner a mi hijo a aguantar a aguantar hambre porque la gente cree que soy mala mamá, yo lo alimento, trasnocho, lo cuido, yo soy buena mamá.
Tuve una prima que estuvo en embarazo al mismo tiempo que yo. Mi prima va para 40 años creo, y el bebé de ella fue por cesárea, y me parece mal que usen el término “parto natural”, pues, naturalmente también se saca por cesárea, y a ella, también el montón de gente que le dijo que no era buena mamá que porque no había sentido los dolores de parto, y entonces uno con todas esas cosas mentales . Y es que la recuperación de la cesárea qué?? Eso no le duele a uno al otro día o que? Entonces la sociedad le hace a uno sentir que no podemos hacer las cosas bien, pero uno debe ir a su ritmo y sobre todo porque estamos aprendiendo. Yo tengo una hija pero si llego a tener más, todos serán experiencias diferentes, y uno no va a cumplir las expectativas de nadie.”